El amor llega en su justo momento. En ocasiones se hace esperar, y el corazón se impacienta. Los cajones de la vida se van llenando de momentos pendientes de compartir con ella, con él. Se guardan besos, se esconden silencios, se ensayan sonrisas. Y un buen día, sin más, lo entiendes, lo sientes, lo vives y lo quieres para siempre. ¿Quieres casarte conmigo? contigo si, contigo quiero.
Y lo cotidiano se despoja del hastío. Y aquellos besos guardados saben a nuevo. Encuentras un hogar, una nueva casa en la que refugiarte, en la que refugiaros, tu boca, su mirada, tu vientre, su espalda.
Ya sois dos y queréis jurarlo. Y contarle al mundo que es verdad, gritar que es cierto y verdadero, aquello que contaban entre brumas los más viejos. Historias de parejas que caminaban los años de la mano, que se lamían las heridas, que se buscaban la risa, que se aprendían de memoria la piel del amado para recordarla cuando el tiempo les apagara los sentidos, que perdonaban, que comprendían, que se buscaban porque no entendían mejor compañía. Parejas cogidas de la mano, caminantes, enamorados.
Si, es cierto, todo eso y más. Está escrito sobre las piedras de los acantilados. Viejas costas que saben escuchar los susurros de un viento anciano y coqueto. Mientras, el mar bravío se alía con la lluvia para alejar los miedos, para llevarse a todo aquel que no entienda de sentimientos.
Todo ocupa su lugar. Ya solo importan ellos. Ellos han encontrado su hueco, la impaciencia más hermosa, el refugio de sus secretos, el compañero de viaje, el amante amigo, el susurro de madrugada, la luz entre la tormenta, la respuesta. Si, es amor, y aquí y ahora, es cierto y es vuestro.
©Eva Villamar
- Fotografía: Oscar Companioni
- Maquillaje y Peluquería: míos – Eva Villamar
- Tocado y Accesorio cinturón: Janet & Schulz
- Vestido: Javier Quintela Atelier
- Zapatos: Jimmy Choo
- Ramo: La Florería
Gracias por ver y leer!
Gracias a ti Eva, por escibir estos textos tan maravillosos, que llenan de belleza historias como la de Beatriz y Javier.
Gracias a ti por leerlos, es como se hacen realidad.
Besos!