Tamara y Daniel

La conocí con el rostro iluminado por una delicada sonrisa. Pensé que serían los nervios nuevos por las ilusiones sin estrenar, pensé que sería el momento. Pero lo cierto es que Tamara sonríe siempre, ella es risueña, dulce y divertida. Y cuándo conocí a Daniel lo comprendí todo. Estaban hechos el uno para el otro. Solo faltaba una ceremonia que contara su historia, porque ellos ya se hablaban en un mismo idioma, ya se entendían sin palabras. La misma mirada, la misma sonrisa, el mismo corazón.

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Y su risa se nos contagió a todos, porque hubo momentos en los que la línea del ojo no me salía derecha ni a la de tres, a carcajadas no se puede! (un respiro!, termino y seguimos con las risas!) Pero qué hermoso es ver flotar la alegría en el ambiente. Trabajo? No, un placer, un honor, atesorar felicidades, compartir sentimientos, más bellos recuerdos.

El vestido? Perfecto! Cómo perfecto el tocado, el velo, el ramo, cada detalle, cada rincón. Sucede así, cuándo los novios mandan y todo se hace como quieren ellos, porque el resultado es reflejo de su personalidad. Y el resultado fue colorido, alegre, desenfadado, luminoso.

Y se dijeron si, si quiero… Quiero reírme a tu lado, quiero robarte un beso, quiero estar contigo aunque el tiempo tuerza el camino, quiero estar contigo. Quiero buscarte entre rincones prohibidos, como cuándo nos conocimos. Quiero ver crecer tus arrugas, y espero que sean muchas, y las miraremos mientras recordamos la historia que cada una cuenta. Y también quiero tu tristeza, tus penas y tus lágrimas, las haré mías y las destruiré para ti, para que vuelva la risa, nuestra risa, nuestro sentimiento… Dijeron si, si quiero.

Y entre lluvias juguetonas y rostros emocionados comenzó la Fiesta. Con cada detalle preparado por ellos, con mimo y cariño, con ilusión, amor a raudales. Entre vítores y cervezas de la tierra.

Y como todo cuento que se precie termina con un comienzo, el de la historia real, la que cuenta de verdad y la verdad. Que la vida los espera, que el destino lo escribirán a golpe de buenas intenciones, que serán dichosos, lo se. Porque cuidarán el uno del otro, porque estarán juntos. Porque seguirán sonriendo, cada día. Partida ganada. Felicidades Pareja!

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Eva Villamar

  • Fotografía: Susana Ríos
  • Maquillaje, Peluquería (y texto) míos: Eva Villamar
  • Vestido y velo : Pronovias
  • Tocado: Tocados Ana Vez
  • Ceremonia: Marilé Eventos
  • Lugar: Pazo de Brexo con Josmaga Restauración

Eva Villamar

2 comentarios en “Tamara y Daniel”

  1. Preciosoooooo muchas gracias da gusto organizar el dia mas feliz de nuestras vidas con el grupo de profesionales que hemos elegido y recomendados sin olvidarme de nadie

    1. Mil gracias Daniel, por la parte que me toca. Sois encantadores y merecéis lo mejor. Es muy fácil trabajar para personas así.

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