After party…

Está bien, iré. Supongo que entre mi aburrimiento y su insistencia haré un hueco esta noche para salir de casa. Son demasiadas noches encerrada, demasiadas noches intentando olvidar, tantas, que la olvidada empiezo a ser yo. Esta noche me recupero, pinturas de guerra y cuero, esta noche le preguntaré al espejo quién es la más bonita del cuento. Quizá su compañía no resulte tan aburrida como en el trabajo. Porque necesito respirar y el aire de la noche es más aire para mis pulmones, es más cierto, más libre. La noche, su excusa y mis tacones. Me voy.

Me duelen los pies y el estómago. Es lo que pasa cuando caminas las calles de madrugada y a golpe de risas nuevas, que se convierten en carcajadas. Carcajadas inesperadas. Mañana tendré agujetas y zapatillas, seguro. Pero hoy aún sigue siendo hoy.

Casi está amaneciendo. No lo esperaba de él. No lo esperaba de mí. Y ahora espero su llamada. Me borro el carmín y los malos recuerdos. No eras tan importante, te hablo a ti, mal recuerdo. Casi había olvidado la sensación de querer detener la noche, de querer volverla infinita. No soy de compañía fácil, me marcho, me aburro y me marcho. No lo esperaba de él. No lo esperaba de mí.

Una flor. Blanca. Qué poco me conoce. Cómo puede conocerme tan bien. Supongo que las máscaras no funcionan ante quién sabe mirar de verdad. Y sigue sin llamar. Un hombre de principios. Desgraciado. No quiero darle la razón, “serás tú la que llame, serás tú la que me pida una segunda cita”. No quiero darle la razón.

Pero no puedo dejar de reír.

Recuerdos, ya tengo recuerdos, nuevos, frescos, buenos. “Cómo es posible que no te guste el vino”. Y cómo fue posible que terminásemos la botella, odio el vino y las flores blancas. “Tienes los labios manchados, el tinto les da ese color”, y me miraba como el lobo a Caperucita, pero no hacía nada. Después, la ciudad, callejuelas empedradas, las confesiones, de madrugada, un rincón secreto, una historia inventada, y, al final, un portal conocido, el mío. Y de mi boca salen las palabras “no quiero marcharme”, “pero te irás”, contesta. No hace nada, y se aleja, y se ríe, y me recuerda “serás tú la que llame”.

Ganaste…

Texto: Eva Villamar

  • Fotografía: Varela Moure Photography
  • Modelo: Diana Fuentes Verdía
  • Maquillaje, peluquería y estilismo: Eva Villamar

Eva Villamar

4 comentarios en “After party…”

  1. Natalia Paderne

    Me encanta vuestro trabajo!!!! Muy profesionales y la modelo impresionante!!!!! Siguenos subiendo trabajos q me flipa! Un biquiño

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